Los Diez Mandamientos El Sexto Mandamiento
Generalmente todas las personas valoran su vida. Es porque fuimos creados para vivir para siempre.
Una vez la vida era tan hermosa que vivir era el mayor gozo. No había amenazas, no había envejecimiento, no había enfermedades. Desafortunadamente, todo eso cambió cuando el pecado entró en el mundo y por el pecado, la muerte. Aun así, a pesar de esa triste realidad, todavía luchamos para proteger o defender nuestra vida porque es preciada. La vida también es preciada para Dios nuestro Creador. Lo dejó muy claro al cercar firmemente la vida de cada persona. La cerca dice: “Así dice Jehová, no matarás”.